Galo: Buenos días, ¿cómo estás, Gabriel?
Gabriel: Hola, ¿qué tal, Galo? ¿Cómo estás? Un gusto. Quiero agradecerte por tener esta conversación con nosotrxs, con 25 Watts. Quisiera ir primero a lo sentimental y preguntarte cómo te sientes con esta cuarta edición del festival que está por comenzar.
Galo: Realmente estoy súper contento. No sé si hace cuatro años hubiéramos pensado que en tan poco tiempo íbamos a estar como estamos ahora en el festival, haber crecido tanto, tener la recepción que tenemos de la gente.
Sabíamos que podía ser un festival que iba, poco a poco, a ganar seguidores, pero este último año fue un salto gigante que no nos esperábamos, que nos ha tomado por sorpresa, que nos tiene emocionados, durmiendo poco y muy ocupados, pero estamos súper contentos en general de todo el festival.
Gabriel: Quisiera preguntarte, yéndome para el nombre del festival: Festival Internacional de Cine Friki, y quisiera que nos hables un poco más de esa última palabra, de lo “friki”, de dónde nace aquella inclinación por lo friki, saber qué es lo “friki”.
Galo: Cuando empezamos el festival con mi socio hace unos tres, cuatro años, estábamos en esta búsqueda del nombre. Queríamos algo que tenga que ver con esta idea del terror, la ciencia ficción y la fantasía, y en esa lluvia de ideas salió la palabra “friki”. Lo “friki” como lo usan los españoles, claro. En el inglés viene de freak, pero en España la idea del friki es como una persona que tiene un gusto por algo demasiado fuerte, como una persona que le gusta el cosplay, es un friki del cosplay. Nosotros somos unos frikis del terror. Somos gente con un gusto muy específico que generamos comunidad, entonces cuando vimos esa definición nos gustó muchísimo y dijimos “ese es el nombre del festival”.
Gabriel: Buenísimo, verás, a mí me importa bastante que el festival esté con esta inclinación al género, al terror, a la fantasía, porque siento que es un espacio que no se ha abordado mucho, entonces creo que es una forma de resistencia, de pensar el cine a través del género, sin abandonar cuestiones de importancia política por ejemplo, porque yo pienso, no sé, en los zombies, que en realidad vienen de una alegoría a la esclavitud o al control de masas; pienso en Star Wars donde se habla, por ejemplo, de una ausencia de la democracia, siempre con una connotación política muy fuerte, entonces quisiera que nos cuentes sobre el género como este espacio de resistencia y qué piensas tú también sobre por qué el festival va hacia el terror, a la fantasía.
Galo: Bueno, empezamos por un tema de gusto. Creo que en algún punto mi socio Andrés de la Torre y yo decíamos que los dos entramos al cine por el género, y ya luego descubrimos otras cosas, aprendimos un montón de cosas, pero antes de saber bien qué hacíamos, era el género el que nos llamaba, y la idea del género, como para responder a la primera parte de lo que me decías, nos parecía importante apoyarlo desde un festival, porque precisamente eran géneros del cine que estaban un poquito relegados en los circuitos tradicionales de festivales en ese momento.
Ahora hemos descubierto que no es así, en realidad. Hay un boom del género gigante ahorita en Latinoamérica. Este año el festival se unió a Fanlatam, la Asociación de Festivales de Género de Latinoamérica, que es un crecimiento también demasiado importante para nosotros este año, y nos hemos dado cuenta de que estamos conectando además con otra gente de Latinoamérica que hace lo mismo.
Justo pensaba esta semana que un tema que tenemos con el terror y la ciencia ficción es que se les ha tratado como géneros más sosos, más vacíos, y no es cierto eso. Pienso que el festival es para gente que puede tratar temas sociales y políticos, pero lo quiere hacer a través de una metáfora,
Como tú decías, los zombies, las invasiones de extraterrestres, todos pueden ser una metáfora para un tema social y político, el cyberpunk es igual, te habla de la sociedad y un montón de cosas, simplemente que está un poquito escondido dentro de un mundo fantástico, pero eso no quita que pueda ser un comentario muy profundo sobre un montón de temas. Creo que todos tenemos claro eso cuando vemos ciertas películas, pero no lo apreciamos tanto. Por ello la idea era dar este espacio donde tal vez hay gente que quiere hablar de ciertos temas a través de este tipo de género y que se sientan seguros de que pueden hacerlo, y nosotros descubrir de qué va.
Gabriel: ¿Y cómo se sienten al recibir historias de ficción, de fantasía de varias partes del mundo? ¿Cómo, de alguna manera, se conectan esas historias de ficción? ¿O qué tan diferentes son las unas a las otras? No sé, pienso en una película de fantasía de Alemania con una de Colombia, no sería lo mismo, o quizás sí.
Galo: Inevitablemente son un reflejo de lo que está pasando en cada sitio. Para ponerte un ejemplo, siempre tenemos un montón, pero este año ha sido particularmente notorio, un montón de cortometrajes de Irán. Entonces hay historias de fantasmas, pero que hablan sobre lo que está pasando en Palestina.
Y es como, de lo que decía, es una manera de enganchar a otro tipo de audiencia para hablar y a pensar en estos temas. Obviamente es un reflejo de lo que está pasando allá. En Colombia también hay cosas particulares, en Ecuador también. El otro día en la rueda de prensa hablamos también un poco sobre cómo la película de Shaman (2025), que a pesar de haber sido grabada hace un año, ahora la gente, la audiencia, puede encontrar en el largometraje una interpretación de algo que está pasando ahorita en Ecuador, con la situación política actual. Es interesante que a veces el mensaje está ahí, pero que también las lecturas que le damos dependen de nosotros, de lo que está pasando ahorita y lo contextualizamos. Entonces, no sé, es interesante porque la idea es que sea un cine que luego te invite a conversar y a discutirlo. Es en los festivales justo ese espacio de conversación.
Gabriel: Pensaba en esto de los espacios de resistencia, en cómo podría ser la quinta edición que puede venir, y si de alguna manera lo ampliarías o se mantendría con lo del género, ¿cómo lo consibes?
Galo: El género siempre va a ser nuestro eje central. Es chistoso porque si me preguntabas esto mismo hace un año, yo te hubiera dicho, “no, el festival es un festival que busca ser como, por el momento, muy de Quito”. No teníamos ideas de, por ejemplo, tener más de una sede, porque no tenemos ni los recursos ni el contenido para más de una sede. Y eso te lo hubiera dicho hace un año.
Ahora tuvimos que ampliarnos a tres sedes. Ayer estábamos hablando con Ana Cristina Sáenz, la productora del festival, sobre esta idea de tal vez en algún punto tener más días, porque ya nos faltan espacios en el tiempo que tenemos de cartelera.
Gabriel: A mí me emociona bastante la ampliación y acogida que está teniendo el festival, y quisiera que justamente me hables sobre esta formación de público hacia el género, de cómo lo has visto, cómo lo has sentido, y también saber cuál es la importancia de formar un público que piense en el género como un lenguaje que puede ayudar a expresar tanto algo político como social, como habíamos dicho, pero también cosas internas, desde lo íntimo, desde lo sensible, cosas que sólo podrían salir a través del género como terror o fantasía.
Galo: Sí, bueno, pensando en lo que dices, creo que es un poco lo que te decía, hay gente que tal vez no se siente tan cómoda de hablar del tema directamente, y se siente más cómoda a través del género, de explorar esas ideas; es interesante. Creo que la audiencia que hemos ido captando, el público que se ha ido uniendo al festival, viene de diferentes lados, viene gente que busca eso. Viene gente que entra por temas en particular, como, no sé, les gusta las películas de zombies, pero también hay gente que viene y descubre otras cuestiones, descubre que también hay cosas ocultas dentro de estos géneros.
Este año tenemos un montón de películas llenas de simbolismos. Siempre pienso en esta película que, no tengo que dar favoritos, pero tengo una película de fantasía que a mí me encanta, y es muy bonita, es fantasía, pero también es sobre aspectos culturales en México, sobre la poesía, y siento que esas pequeñas cosas te van abriendo puertas, y cada año vamos atrayendo diferentes personas que se van quedando porque descubren algo nuevo en el festival. Y sí, está la idea de lo friki, que se va haciendo una comunidad que viene de diferentes lados, pero que también se va uniendo a este festival, y que ojalá se sigan sumando cada año.
Gabriel: Quisiera ponerme un poco más técnico, y preguntarte sobre la programación, cómo has sentido la programación este año, si está dividida por secciones, o por dónde quisieras abordar la programación, para que nos cuentes sobre ella.
Galo: Bueno, verás, todos los años hemos tenido las seis categorías, hemos tenido: Largometraje y Cortometraje de Terror, en todo su espectro, porque, por ejemplo, el año pasado tuvimos un musical gore que entraba en esta categoría, y otros han sido como slasher típicos, también están las categorías de Largometraje y Cortometraje de Terror, Largometraje y Cortometraje de Ciencia Ficción, el Premio del Público, que este año toma más peso, porque desde este año el premio del público es la película que se pasará en la premiación; y la última categoría es una categoría que yo le tengo un montón de ilusión desde el primer año, pero nunca se había abierto porque no había suficientes inscritos, y era el premio del mejor tráiler de película.
A mí me interesa esto porque nos parece importante la idea de que el espacio del festival también sea educativo. Nos parece interesante pulir eso donde los ecuatorianos somos medio reacios que es hacer tráiler de películas y hacer todo el ruido que hacen, por ejemplo, las películas de industria. A veces un buen tráiler te engancha con una película que de otra manera no la descubrirías, entonces nos interesa hacer eso. Este año como primera vez ya tenemos a tres inscritos en competencia, entonces vamos a seguir creciendo en eso porque quisiéramos hacer un taller eventualmente o una masterclass sobre el tema.
Gabriel: Claro, me parece interesante lo de las masterclass, lo de pensar igual en los festivales como un espacio de aprendizaje también me parece muy valioso porque justamente como reúne personas de varios pensamientos, de varios lados, se puede formar ahí algo muy lindo. No sé si quisieras contarnos algo más también de las otras masterclass que han tenido.
Galo: Quisiera mencionarte algo de la curaduría, y es que el proceso este año ha sido también bien complejo porque triplicamos la cantidad de inscritos. Estamos muy contentos con esto, pero además fue una cosa rara porque la gente se estaba inscribiendo progresivamente, pero luego tuvimos como un boom de inscritos entre julio y agosto y los primeros días de septiembre cuando se cerraba la convocatoria. Entonces este año como equipo de festival tuvimos que ver más 50 horas de material que nos enviaron versus los 20 que tuvimos el año anterior.
Nos tocó hacer algo que nunca habíamos hecho. Aparte de vernos todo el contenido y opinar de cada uno, hicimos una segunda pasada y volvimos a filtrarlos porque no nos entraba todo el contenido; lo cual es maravilloso. Siento que con un festival que ya tiene cuatro años ya empieza a ser más atractivo para los largometrajes. En algún punto eso crece. Teníamos siempre una considerable cantidad de largometrajes, pero en algún momento nos tocaba encontrarlos, a veces invitar y ver cómo llenar esos espacios. Este año tuvimos 17 largometrajes inscritos y no nos entraban todos en la programación. Tuvimos que dejar afuera uno o dos que la verdad a mí sí me hubiera gustado que estén y que en otros años seguramente hubieran entrado, pero este año ya simplemente el nivel era otro y el espacio era otro y tocó cernir.
De las masterclass, este año tenemos tres: sobre la creación de mundos fantásticos con Javier Cutrona, director de la película Alucina (2024). Tenemos una masterclass sobre dirección de fotografía con Daniel Andrade, director de fotografía de la película Shaman (2025), de Antonio Negret. Esas dos vienen con la función de la película. Aparte tenemos una masterclass el día domingo en Cineplex Bistro, que es un conversatorio en el bar del cine donde Cristian Mejía Carrascal de Fantasala Colombia y Oveja Eléctrica Colombia va a venir a hablar del género y sus ramificaciones, y de los subgéneros dentro de cada uno de los géneros fantásticos.
Además, tenemos el laboratorio Dimensión Fantástica. Vamos a anunciar este fin de semana los diez proyectos seleccionados que van a trabajar con Cristian Mejía durante los cinco días del festival puliendo el argumento y construyendo además la mitología de un corto fantástico. El último día haremos una presentación de los pitch de cada uno de ellos con jurado y los tres mejores proyectos se ganan una licencia de un programa de guion que se llama Studioviti que es uno de los auspiciantes; y el mejor proyecto de laboratorio se gana mil dólares en equipos o en alquiler de equipos con Hangar Films que es otro de los auspiciantes. Nuestra idea es lograr empujar para que se creen más proyectos de género y que ojalá terminen el ciclo además regresando al festival.
Gabriel: Hablando de las grandes sedes, podrías comentar cuáles son y qué se siente llevar este cine de género de terror y de fantasía a estos espacios.
Galo: Fue súper lindo porque este año originalmente no sabíamos que íbamos a crecer y no sabíamos en dónde podríamos crecer. Fueron las otras sedes las que nos buscaron y eso también es muy emocionante porque significa que el festival ya está sonando. SalaSur de la Flacso justo había abierto sus puertas este año y nos contactaron, ya el hecho de que nos hayan considerado es interesante. Con Cineplex tenemos una relación distinta, porque la persona que trabaja ahí nos había apoyado desde el primer año, entonces fue como un reencuentro.
Así logramos desbordar todo este contenido que de otra manera no nos entraba en una sola sede. Estamos muy contentos, va a ser interesante, creo que nunca nos ha pasado, pero ahora vamos a ver cómo se siente la recepción de este contenido en cada una de las tres salas, porque estoy seguro de que va a ser diferente.
Gabriel: Quisiera hablar sobre tus expectativas para una próxima edición y cómo quisieras construir, ampliar este público que se ha formado también. ¿Tienen pensado, por ejemplo, llegar a Guayaquil?
Galo: Guayaquil es muy interesante, porque sabemos que hay mucho más consumo de terrora allá. Y Guayaquil nos está pidiendo esto ya desde el año pasado, entonces creo que probablemente, si es que crecemos en un principio, el primer lugar hacia donde vamos a crecer es Guayaquil. Eso sería algo que me gustaría un montón.
Por otra parte, hay un montón de eventos paralelos que queremos hacer durante el festival, que algunos ya iban a pasar este año, pero por cosas de la vida no hemos logrado todavía implementarlos. Porque el festival también, además de ser un espacio de crecimiento y de competencia, es, para mí, una carta de amor al cine. Yo crecí con el cine de terror, ciencia ficción y fantasía, entonces también nos interesa mucho crear un espacio donde la gente consuma cine clásico. Nos encanta la idea de la sala del cine clásico. Nosotros molestábamos desde el primer año con mi socio de que esto es un festival de cine canguilero.
Este año tenemos la presentación de medianoche de The Lost Boys (1987), de Joel Schumacher, esta película de vampiros de los ochentas. El segundo año tuvimos La Noche de los Muertos Vivientes (1968), de George Romero, que aprovechamos el festival para poder ver una película como esa en pantalla grande. Desde el año pasado también tenemos las películas musicalizadas en vivo, que nos encanta la recepción de la gente. El año pasado tuvimos El Gabinete del Doctor Caligari (1920), de Robert Wiene, musicalizado por Fernando Silio, de la Escuela de Música de La UDLA. Este año volvemos, pero con El Fantasma de la Ópera (1926), de Lon Chaney, que será un evento familiar en la mañana en SalaSur.
Gabriel: Qué chévere. Nada, yo quisiera decirte lo que pienso del festival, y es que la verdad me emociona mucho. Justo lo que dices sobre lo que fue el cine y lo que es actualmente y pensarlo a través de estos géneros como el terror, la fantasía, géneros muy importantes para el cine, porque de alguna manera explotan la parte técnica del mismo. Siento que siempre hay que tener como muy pendiente al género. Que hagan eventos, así como los del El Gabinete del Doctor Caligari, musicalizado, me parece una cosa bella. Y nada, como para finalizar, quisiera preguntarte, qué piensas tú de esta edición actual, qué piensas de la que puede venir, cómo te sientes con el festival, cuáles son tus emociones dentro de esta realización del festival.
Galo: Para mí cada año en el festival es una montaña rusa de emociones, además este año ha sido especialmente lindo. Como hemos crecido tanto también ha sido caótico, crecer es caótico, y estamos en ese proceso, y es chistoso porque en todas las ediciones del festival, apenas estamos por comenzar y ya estoy pensando en las cosas que quiero implementar para el año siguiente, porque queremos que haya “friki” para rato. Estamos siempre pensando en cómo crecer. Queremos que el festival sea una experiencia, que sea ver películas, pero también una experiencia fuera de la pantalla, entonces pensamos continuamente en cómo implementar eso, en cómo hacer que estos eventos se junten, que sea un espacio también de conexión entre la gente. Siempre buscamos cómo seguir creciendo con ese tipo de cosas.
Gabriel: Me parece increíble. Bueno, nada, agradecerte, agradecer también a Ana por su trabajo en el festival. Les agradezco muchísimo por considerar este espacio, esta conversación, así podemos aprender más. Nos encanta a nosotros la idea de los festivales, y un festival como el Friki es una idea de sostener el cine de género y resistir desde el género también, que yo lo veo muy valioso.
Galo: Muchas gracias por recibirnos!