25 Watts es un espacio para pensar, sentir y vivir el cine desde nuestras múltiples voces.
No somos una revista de especialistas ni un manual académico: somos un punto de encuentro donde se cruzan la crítica, la memoria y la escritura libre.
Nos interesa el cine que cuestiona y provoca, el cine que se filma desde las periferias, desde los márgenes, desde la resistencia cultural.
Creemos en el cine como forma de expresión política, íntima y colectiva; un arte que no obedece a las reglas del mercado ni a las jerarquías de la industria.
Opción: los conceptos industriales o jerarquizantes.
Nuestro compromiso es abrir un espacio para nuevas miradas y a cineastas emergentes, reconocer el cine latinoamericano y acompañar las búsquedas independientes que atraviesan territorios, lenguas y cuerpos.
Escribimos para incomodar y conmover, para generar reflexión crítica, pero también para celebrar la sensibilidad de quienes viven el cine en la cotidianidad: desde un cineclub de barrio hasta un festival internacional.
No buscamos imponer verdades únicas ni repetir discursos oficiales: queremos abrir un espacio vivo de crítica, memoria y creación.
Creemos en la escritura libre, en los textos que se equivocan, en las miradas que nacen de una sala oscura, de una conversación o de un recuerdo. Aquí todas las voces son bienvenidas: quienes filman con lo que tienen, quienes escriben desde la calle, quienes reflexionan con paciencia o con rabia.
Defendemos el cine latinoamericano, el cine independiente, el tercer cine y las nuevas formas de narrar que resisten al olvido. Sabemos que escribir sobre cine es también un acto político: preguntarnos qué historias se cuentan, quiénes las cuentan y desde dónde.
25 Watts quiere ser un lugar de encuentro y de construcción colectiva, un refugio y al mismo tiempo un espacio de lucha cultural. Creemos en la circulación del cine y de la palabra como forma de comunidad, como práctica de memoria y como apuesta por un futuro distinto.
Aquí escribimos juntxs para imaginar otros cines posibles.